martes, 19 de junio de 2007

·Listen·

Y la más ligera nota baja pudo llenar los espacios semi-vacíos.


El piano siempre será mi gran sueño... como un majestuoso sueño jamás alcanzable, como una grandeza nunca asignada para una insignificancia como yo.

Y entonces recuerdo con impotencia mis No desesperados en la academia.


Listen, listen.. listen, listen...


Acordes completos, la lluvia, un coro...

La perfecta armonía para este depresivo momento, cuando lucho con todas mis fuerzas por convencerme de mi fortaleza.


Las notas en piano, pianissimo, y luego resucitan en un crescendo. Lentos compases se suceden matizándome con sus matices, respirando el mismo aire, aquellos silencios tan bulliciosos, tan principales en la obra.


Listen, listen suspiran tranquilos, mientras la madera de un cambio de acorde guitarresco resuena bajo lo nupcial. Amo aquello que lo hace tan humano como divino...


Entonces un piano, un pianissimo, la lluvia cesa y la canción termina.




1 comentario:

Arconte dijo...

Solo la lluvia me permite dormir tranquilamente. Me transporta a aquellos momentos de mi niñez donde no habia preocupacion... donde salia con mis botas a meterme a todas las pozas, sentir, caminar, ser libre y correr...

Ahora que creci, puedo correr, puedo ser libre, caminar y meterme a las botas si quiero... pero olvide como sentir.

Es por eso que adoro la lluvia, por que al caerme denuevo en la cara, al quedar con el pelo blanquito por las gotitas de lluvia me doy cuenta de que puedo sentir, no como alguien con responsabilidades, sino como ese niño, que se fue y no volvera.